Home. Un documental que te hará amar tu planeta.

            En “Home”, se pueden observar imágenes que expresan la situación de la Tierra y como nosotros los seres vivos, podemos cambiar de manera irreparable estos procesos ambientales.

            Un punto muy importante que expresa allí, es la vinculación, pues todo está relacionado, nada se maneja por sí sólo. La tierra y los organismos se encuentran conectados, pues un organismo, no puede ser “autosuficiente”. Se visualiza también que “Home” explica el progreso de las algas y lo relacionado al proceso de la fotosíntesis.

              El documental logra una orientación con respecto a las actividades humanas, donde refleja la revolución agrícola y sus repercusiones, antes de pasar a hablar sobre el aprovechamiento del petróleo (dando lugar a incendios), la industria, las ciudades y la desigualdad como nunca antes se ha vivido. En la actualidad es importante tomar en cuenta, este tipo de documentales, pues aquí también se refleja la situación actual de los criaderos de ganado, la alimentación, deforestación y un vértice fundamental la escasez de agua potable, la escasez de energía, entre otros aspectos.

              Otro tema central es el calentamiento global. Un tópico, extremadamente importante, pues esto afecta a todo el planeta, el deshielo de los glaciares, el aumento del nivel del mar y los cambios en el clima están causando destrucciones en las personas que tienen menos que ver con este tema, pero también la forma en que muy pronto se verán afectadas las zonas densamente pobladas.


"La solución está en cada uno de nosotros"

Tips para ahorrar el agua

Cómo cuidar el agua

Tú, desde tu casa, escuela u oficina puedes ayudar que el agua sea un recurso que alcance para todos en nuestras ciudades por muchos años. Mientras la población crece y crece, nosotros debemos aunar esfuerzos para bridar a todos este servicio esencial, por eso pedimos tu colaboración, a través del simple cuidado, y buen uso de este simple elemento indispensable para nuestra vida.
 



Regiones de Venezuela afectadas por la contaminación del agua

  • Los ríos Guaire y Tuy. 
  • El lago de Valencia y los ríos tributarios
  • Los valles de los ríos Tocuyo y Aroa 
  • Los ríos Unare, Neveri, Manzanares, Guarapiche, y sus afluentes
  • El lago de Maracaibo
  • Las aguas costeras de sur-este del golfo de Venezuela; como producto de derrames de petróleo, caída de desechos industriales y petroquímicos.

Cada gota cuenta

Una de las consecuencias más importantes del Calentamiento Global y de los Cambios Climáticos derivados de dicho calentamiento, es la relacionada con los ciclos hidrológicos regionales y los cambios que podrían ocurrir en la cantidad y calidad de los recursos hídricos y en las obras hidráulicas construidas y por construirse.


El agua es uno de los recursos potencialmente más vulnerables a los cambios climáticos. A pesar del enorme volumen de agua que existe en el planeta, 1,41 mil millones de km3, sólo el 2% es agua dulce, la mayor parte de la cual (alrededor del 87%), se encuentra en capas de hielo, glaciares y aguas subterráneas, y un 13% (unos 2000 km3) es la cantidad de agua disponible, que se encuentra en ríos, lagos y otros cuerpos de agua dulce.

Los posibles impactos regionales de los cambios climáticos sobre el escurrimiento superficial y el caudal, deben evaluarse por medio de modelos hidrológicos adecuados y sobre la base de escenarios climáticos plausibles, de cambios en la precipitación, temperatura  y radiación, a objeto de precisar la sensibilidad de las características hidrológicas de una cuenca o región.

    También se requiere evaluar los posibles efectos, directos e indirectos, de los cambios climáticos (precipitación, temperatura y otras variables) sobre la evaporación, evapotranspi-ración y balance hídrico, a objeto de inferir las posibles consecuencias sobre la vegetación, los recursos hídricos y la producción agrícola.

    Las evaluaciones que se han hecho de los cambios climáticos globales, resultantes de las actividades humanas por el uso de combustibles fósiles, deforestación, actividades agrícolas y empleo de clorofluorocarbonos, se basan en los estudios realizados por medio de los modelos de circulación general de la atmósfera (llamados en inglés GCMs). De acuerdo con el Panel Intergubernamental de Cambios Climáticos (IPCC por sus siglas en inglés), los cambios climáticos conducirán a una intensificación del ciclo hidrológico global, lo que podría generar importantes impactos sobre los recursos hídricos. Un cambio en el volumen y distribución del agua afectaría el suministro de agua subterránea y superficial, para fines domésticos, industriales, agrícolas, generación de energía, navegación, ecosistemas acuáticos, recreación y turismo basados en el recurso hídrico. Aún, pequeños cambios en la temperatura y precipitación, junto con las respuestas no-lineales en la evapotranspiración y humedad del suelo, pueden resultar en cambios relativamente grandes en el escurrimiento y los caudales, especialmente en regiones secas.

Entre los enfoques metodológicos desarrollados recientemente para abordar este problema, se señalan los siguientes:

  1.- Análisis de las variaciones a largo plazo en la escorrentía y elementos meteorológicos durante períodos del pasado,
  2.- empleo de métodos de balance hídrico durante un largo período de tiempo,
  3.- empleo de los modelos de circulación atmosférica, y
  4.- empleo de modelos hidrológicos deterministas.

Nuestro planeta


        Una característica muy común en la sociedad actual es que consideramos a la naturaleza que nos rodea como algo muy lejano y se parado de los seres humanos. Debido a la urbanización creciente de los centros de población, la masa de pavimentos sobre los suelos aumenta cada día, las construcciones de materiales artificiales brotan por doquier. 

       Nos estamos acostumbrando a ver plantas, árboles y naturaleza tan sólo como adornos y lo peor de todo, es que algunos la ven como un estorbo. A los animales silvestres prácticamente ya no los vemos en su ambiente natural, algunos ni los conocemos y muchísimo menos nos relacionamos con ellos (Álvarez, 2001).

      Con esta visión cada día nos alejamos más, física y mentalmente de nuestra conexión natural con todos los elementos que conforman a la madre naturaleza. Pretendemos vivir en una burbuja, pretendiendo no depender del medio ambiente que nos rodea. No tomamos en cuenta que para coexistir existen múltiples relaciones y procesos entre la naturaleza y nosotros, que permiten la vida en este planeta.